La gallina de los huevos de oro...
¿A donde te fuiste...
que no te veo?...
Desapareciste...
como nube en cielo...
Guapa...emplumada...
con garbo en tus patas...
Reverencias...
hasta que te hartaste de tantas prebendas...
¿A donde acudir...
para recobrar el brillo de tu canto...
el fruto de tus entrañas?..
Te extrañamos!...
Épocas de abundancia...
derroche de dinero...
caprichos y lujos superficiales
te extinguieron
¿Quién te exprimió…
obviando que eres pilar viviente de lo solvente?...
¿Quién te exprimió…
obviando que eres pilar viviente de lo solvente?...
Gallina de los huevos de oro...
mis manos te tuvieron...
Acaricie tus suavidad en apasionada entrega...
en ti...
deposité mis sueños y quimeras...
Te paseaste en palacios de cristales…
fantasías y pies de
barro...
tu efímera figura...
Dorados huevos de la abundancia…
dieron la embriaguez de
creernos dueños de algo...
Ambiciones desmedidas en disparate...
¿A qué se debe
tanta ignorancia en querer tener para ser?...
Amarga y necesaria experiencia…
perder...
Perdiendo...
uno consigue ganar lo imperecedero...
Los tesoros que te adornaron castigaron tu carne...
por soberbia...
De espíritu abigarrado...
profundo agravio...
economías heridas...
Sepamos recomponer tu belleza
en cantos de madrugada!...
Volver a sentir el valor de tus frutos dorados!...
Nuestra sangre crece…
se consolida en nuevos valores...
Todo gime en arrepentimientos...
en poesía y virtud…
lo taciturno muere...
Meritorio y enfático momento...
recobrar la cordura en mesura...
Gallinas de los huevos de oro...
si el amar es tu refugio
ciertamente meritorio...
te miro al blanco de los ojos...
Olvidemos el espejismo en torbellino inteligente...
tregua y al paraíso de nuevo...
Cautela…
arrepentimiento...
en roja natura mi oído más fino al susurro...
lejos de frívolas actitudes...
Gallina de los huevos de oro...
me rindo a tu clemencia!...
Amor en su garita...
arsenal de un nuevo amanecer!...
Con cariño y respeto...
Enrique...
