Aunque la
verdad duela!...
En un mundo
de mentiras...
farsas y
pantomimas...
¿Quién se
atreve a decir sus verdades?...
Temor a no
ser aceptado...
valorado...
querido...
nos
condiciona perniciosamente...
Engaño tras
engaño...
¿quién tiene
brújula en este mar de embustes?...
No dirás
falsos
testimonios ni mentiras...
octavo
mandamiento...
indicado
en todas las
filosofías...
en bocas de
sabios...
Como si el
hablar fuera
resucitar
palabras de ensueños...
Maquillaje
del lenguajes en capas gruesas...
producen
heridas…
tormentas en
sensibilidades...
En tumba de
aire...
un@ vive de
espaldas a su esencia...
Según
estudios científicos
cada átomo de
nuestro cuerpo
se sabe a si
mismo...
y…
conoce todos
los demás...
Una
interconexión perfecta
donde ninguna
célula
predica sin
su ejemplo...
Bañados en
sinceridad de gozo...
mostrarse tal
y como uno es...
sin
disfraces...
La dulce
espiga embrión de franqueza...
crece en el
alma como flores de agua...
Quitan la sed...
sosiegan el
sentir...
Lo que
digamos...
niegue
vestiduras...
desnudas
nuestras palabras
brillen en
cielo de ocaso...
El desierto
de la desconfianza
se desliza en
los pies...
brotes de
reverdecer...
campos de
honradez...
Si la verdad
nos hará libres...
¿a qué viene
tanta falacia?...
Amémonos...
en
pureza…autenticidad!...
¿A quién
debemos dar cuentas
de virtudes y
defectos?…
Dos manos y
un corazón...
mis dedos
para acariciarte...
en mi
latir...
llama que
arde sin consumirse...
En lúcida consciencia...
decirte lo
mucho que vales!...
Te ruego me
creas...
son
verdades!...
Con cariño y
respeto...
Enrique...
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